El viceministro de Salud de la Provincia advirtió que ante el aumento de casos, no descartan volver una fase atrás para controlar los contagios. En el día de ayer, se anunciaron medidas restrictivas para 110 distritos bonearenses con el fin de aplanar los contagios.
En el día de ayer, la Provincia de Buenos Aires anunció que habrá medidas restrictivas en la circulación de 2 a 6 de la madrugada y pondrán un límite de 10 personas a las reuniones sociales en casas, para así evitar que se propaguen los contagios en los distritos.
Ante estas cuestiones, la posibilidad de volver a una cuarentena estricta no fue descartada por las autoridades y hoy el viceministro de Salud de la Provincia, Nicolás Kreplak, confirmó que si es necesario, se volverá a una fase más estricta. “Hay una enorme vocación de cuidarse. Nadie quiere llegar a la situación de aislamiento total, por supuesto, pero entendemos que si hay que hacerlo, hay que hacerlo. La prioridad es la salud, eso está bastante instalado en la gente”, recalcó.
“La situación que tenemos ahora vuelve a ser como la que se veía cuando estaban subiendo los casos en junio o julio pasado, donde hay que pensar mucho en cuidarse y las salidas tienen que ser las esenciales. Las salidas que no son indispensables, no hay que hacerlas”, agregó el viceministro en diálogo con Radio 10.
La preocupación de la segunda ola viene de la mano de lo que sucedió en otros países que se enfrentaron a una nueva subida de contagios, también agravada por las nuevas cepas. “La cantidad de casos que tenemos y podemos tener puede ser como el año pasado, con la diferencia de que lo que el año pasado se fue estableciendo en tres o cuatro meses, acá se puede establecer en tres o cuatro semanas. Y eso es muy preocupante porque estresa rápidamente el sistema de salud”, anunció Kreplak.
El funcionario bonaerense marcó además que “hay un margen” en la ocupación de camas en terapia intensiva. “Tenemos una ocupación de un poquito más de 60% en el conurbano y arriba del 40% en el interior”, concluyó.