Además, tenía un mensaje relacionado con el juicio al cardenal Angelo Becciu y otras nueve personas por corrupción. La misiva fue interceptada por carabineros italianos.
Este lunes, la policía de Milán interceptó una carta dirigida a «El papa, Ciudad del Vaticano, Plaza de San Pedro, Roma» («Il Papa-Città del Vaticano-Piazza San Pietro in Roma») que contenía tres balas y un mensaje relacionado con el juicio que inició el 27 de julio en el Vaticano. Este último pone en la mira a un cardenal y a otras nueve personas por una supuesta malversación de fondos, blanqueo de dinero y estafa. Dos monseñores, dos funcionarios y cinco importantes operadores financieros son los otros involucrados en la causa.
Por lo que dieron a conocer las fuentes policiales italianas, la carta fue interceptada en el centro de clasificación postal de Peschiera Borromeo, en la provincia norteña de ese país. En su interior, encontraron tres municiones calibre 9 milímetros, tipo Flobert, y ya identificaron al hombre que habría enviado la carta ya que «es una persona conocida» por los gendarmes del Vaticano, quienes junto a los carabineros de Milán coordinarán datos y antecedentes para evaluar su acción y posible peligro. La agencia Adnkronos, ubicada en Italia, informó que la misiva fue enviada desde Francia y el destinatario estaba escrito con bolígrafo.
El juicio penal
Hasta el momento, es el juicio más controversial en la historia del Vaticano, ya que involucra a Angelo Becciu y otros nueve funcionarios, financieros y abogados acusados de cometer por malversación de fondos, abuso de funciones, fraude, extorsión y blanqueo de capitales. Becciu había invertido aproximadamente 200 millones de euros en la adquisición de un lujoso edificio de Londres, que anteriormente había funcionado como depósito de las tiendas Harrods, icónica compañía británica.
La primera instancia del juicio ya pasó y continuará en octubre, para determinar si hubo actos de corrupción por parte de estos diez acusados. De todas formas, sin resolución de ningún tipo aún, es evidente que se desencadenó el episodio más polémico de la historia del Vaticano en los últimos 30 años.
