Las víctimas habrían sido sus propios clientes, entre quienes figuran varios famosos del espectáculo y el deporte.
La Policía Bonaerense detuvo este jueves en Nordelta al abogado Nicolás Payarola, acusado de cometer once hechos de estafa contra sus propios clientes. El procedimiento se realizó en su vivienda del barrio Golf Club, en el marco de una investigación impulsada por el fiscal Cosme Iribarren y avalada por el Juzgado de Garantías N°3 de San Isidro. Payarola será indagado mañana viernes.
Entre las seis víctimas incluidas en el expediente aparece María Macarena Posse, hija del exintendente de San Isidro Gustavo Posse, así como Sofía Ferrarazo, pareja de Payarola e imputada en la causa. A pedido del fiscal, los agentes secuestraron documentación vinculada a Wanda Nara, mencionada por Posse en su testimonio.
Los allanamientos continuaban al cierre de esta nota, con otro operativo en Beccar a cargo de personal de la Comisaría 4°. En paralelo, la UFI Benavidez investiga a Payarola por defraudación por administración fraudulenta y lavado de activos. El letrado también arrastra un procesamiento dictado en junio por la Justicia porteña, acusado de engañar al campeón del mundo Gonzalo “Cachete” Montiel, con un embargo de 810 millones de pesos.
Iribarren detectó que ambas causas se tocan: Juan Marcelo Montiel, padre del futbolista, figura como víctima en el expediente de San Isidro. Según la acusación, Payarola habría intentado ofrecer a la familia Montiel un campo de 132 hectáreas en La Pampa que pertenecía a otro cliente que también habría sido estafado.
El abogado les propuso además la entrega de una camioneta Toyota Hilux perteneciente a un denunciante de la causa de Benavidez y un yate que sería propiedad de la suegra de otra víctima. Payarola ya había conseguido una eximición de prisión el año pasado y abonado una fianza de 40 millones de pesos.
“Wanda está acá, todo adentro lo hablado”
El expediente incluye el testimonio de Macarena Posse, quien no fue clienta de Payarola sino colega en un negocio jurídico que tenía como figura central a Wanda Nara. Posse representó a la empresaria y señaló que fue convocada por el abogado en enero para trabajar en una causa relacionada con la familia de la influencer.
Posse afirmó: “Wanda está acá, todo adentro lo hablado, te envío el convenio”, según relató en su denuncia. El acuerdo contemplaba una cláusula particular: si Nara revocaba el patrocinio antes de un año, debía pagar 600 mil dólares.
“La razón de esa cláusula era sencillamente la exposición, tiempo, dedicación, cantidad de expedientes, seguimiento casi 24/7 de la clienta en cualquier horario, etc. Dicho convenio fue aceptado por la clienta y por Payarola quien se había quedado con la copia firmada por la clienta para dárnosla a nosotras cosa que nunca sucedió”, declaró la abogada.
Posse aseguró que trabajó durante meses, pero el convenio nunca fue firmado por Payarola ni por Nara. El 1° de abril, la influencer revocó su patrocinio. Posse contó que la contactó por WhatsApp y que la conductora “le clavó el visto” sin responderle. Finalmente, decidió acudir a la Justicia y se incorporó como víctima en la causa contra Payarola.





