El ex director del FMI para América Latina sostuvo que el pedido del préstamo “es la mejor solución”.
Con el anuncio del Gobierno en el que la Argentina pedirá ayuda financiera al Fondo Monetario Internacional (FMI) para “hacer frente a esta nueva situación internacional” y el viaje del ministro de Hacienda Nicolás Dujovne para finalmente concretar el acuerdo, el economista argentino y ex director del FMI para América Latina Claudio Loser confesó que le “sorprendió cómo apareció tan rápido” la noticia, pero al mismo tiempo remarcó que “a la Argentina le convenía entrar en un acuerdo con el fondo, porque le iba a ayudar a consolidar el proceso de ajuste”.
En contra punto de la mirada de los economistas Martín Kalos y Agustín D´Attellis quienes no ven con buenos ojos el acuerdo, ya que consideran que “es apresurado”, Loser opinó que “esta es la mejor solución”. “Puede haber otra, pero tienen que trabajar en la parte fiscal de todas maneras. No hay forma de salvarse de eso”, subrayó en diálogo con Ventana Abierta por FM Milenium. Y agregó: “Que haya acuerdo con el FMI ayuda y hace que la Argentina pueda ajustarse ordenadamente”.
Respecto al préstamo que le dará al organismo al país y haciendo un análisis de que desde el Gobierno lo pueden utilizar para “justificar futuras decisiones”, el economista sostuvo que desde su experiencia entiende que “siempre los argentinos nos justificamos en el FMI. En cambio, otros países dicen que van a usar el Fondo, pero toman la responsabilidad de lo que van a hacer”.
Por otro lado, señaló que “el FMI no presta plata para proyectos sino para apoyar la balanza de pagos”, por lo que pensando en el concreto del acuerdo Loser indicó que “un buen acuerdo” sería “uno donde el Gobierno presente un plan de reestructuración del sector público, pero voy a apurar el ajuste fiscal. Es algo muy vendible”.
Al mismo tiempo reconoció que si bien entiende que “la gente tenga miedo”, también aclaró que “el FMI no le va a decir al Gobierno que le corte el apoyo a los pobres o las jubilaciones o pensiones a la gente que ya la tiene”, pero podría existir una medida de retrasar la edad de jubilación como ya lo había planteado desde el Estado.
No obstante, dejó en claro que “esta es una situación complicada pero esto no es la crisis del 2001”. “Creo que la situación es muy diferente. Los bancos se asustan”, manifestó y añadió que “no veo corralito ni nada por el estilo. Estamos en una posición mucho más positiva”.
