En el juicio por los US$ 9 millones que intento esconder en 2016, el ex funcionario mencionó a Daniel Rafecas y María Servini, a quienes vinculó con el kirchnerismo.
El ex secretario de Obras Públicas del kirchnerismo José López, ofreció una versión de los hechos que terminaron en la histórica escena de los bolsos con 9 millones de dólares en un convento religioso de General Rodríguez, más compatible con la que le había contado al juez Claudio Bonadio como arrepentido en la causa de los cuadernos de las coimas.
Entre otras revelaciones, el ex funcionario mencionó a dos jueces federales: Daniel Rafecas y María Servini. Al primero Rafecas lo vinculó directamente con los Kirchner, y respecto a la titular del juzgado 1 dijo que la había visto alguna vez en el monasterio que dirigía la veterana hermana Alba.
“Mi primera noche (detenido) me llevaron a un lugar con tres camas”, declaró López en su cronología respecto al origen y el destino del dinero y las joyas que terminó llevando al convento en la fría madrugada del 14 de junio de 2016.
“Me acostaron en una de ellas y me esposaron de pies y manos. Me mostraron tarjetas de abogados que no conocía. Uno de apellido Núñez y otra era Fernanda Herrera, decidiéndome por esta última”, relató el acusado, en referencia a quien aquellos días se hizo famosa como “abogada hot” por sus sensuales fotos y videos.
Allí fue cuando López sorprendió al tribunal calificando al juez que en entonces tenía a cargo la instrucción de la causa en su contra, y que sólo tuvo un impulso fuerte y una posterior elevación a juicio tras el episodio de los bolsos “A Herrera la conocí en el juzgado de Rafecas, juez de la Capital que responde a los Kirchner”, sostuvo. “Ella me dijo que no tenía que declarar. Lo entendí como un mensaje claro de que no tenía que hablar hasta saber el libro. No me habló de estrategias, documentos ni honorarios”, continuó el acusado.
Luego, para explicar por qué había llevado al convento el dinero que según su última versión le había pedido el ex secretario de Cristina Kirchner Fabián Gutiérrez que escondiera, López contó cual era su relación con el ex obispo de Mercedes-Luján Rubén Di Monte, tutor del singular monasterio de General Rodríguez. “Conocí al monseñor Rubén Di Monte en el 2003 en la oficina de De Vido, con motivo de una audiencia que pidió con monseñor Oscar Sarlinga sobre la licitación de la basílica de Luján que se le había caído una cruz. Era algo que estaba bajo mi competencia y De Vido me pidió que participe en la reunión”, relató es ex secretario.
“En el convento de General Rodríguez vi a Julio de Vido, a su esposa (Alessandra Minnicelli), a Alicia Kirchner, al ex intendente de Avellaneda (Carlos) ‘Cacho’ Álvarez, a la jueza María Servini de Cubría. Di Monte tenía muchos amigos y conocidos”, enumeró López.
Las menciones a los dos jueces federales no los comprometen en ningún supuesto delito.
Fuente: Clarin